Celulitis, erisipela y absceso: así se diferencian en tu piel
A
simple vista, muchas infecciones de la piel pueden parecer lo mismo: enrojecimiento, calor y dolor. Pero en realidad, cada una tiene características que marcan la diferencia:

Celulitis: Es las más profunda de estas tres, la infección ingresa por la piel llegando hasta el tejido subcutáneo o hipodermis (la grasa). Se presenta como un enrojecimiento difuso, sin bordes definidos, que se expande y suele doler al tacto.

Erisipela: también es una infección de la piel, pero mucho más superficial y con bordes bien delimitados. La piel afectada suele verse más brillante y elevada respecto a la zona sana.

Absceso: aquí no solo hay infección, sino acumulación localizada de pus. Se forma una especie de “bolsa” que eleva la piel y genera dolor intenso.
Aunque los tres procesos se ven en la piel, su profundidad y complicaciones son diferentes. Reconocerlos a tiempo puede evitar que una simple infección se convierta en un problema grave.
Mensaje final: El contenido ofrecido es exclusivamente para fines informativos y de formación. No equivale a una evaluación médica presencial. Cualquier síntoma debe ser valorado por un profesional de la salud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario