Tu boca te contrata… o te descarta.
La mayoría se prepara para una entrevista estudiando preguntas.
Pocos se preparan para escuchar cómo suenan.
Y ahí está el problema.
Porque no te filtran por tu CV.
Te filtran por lo que dices… y por lo que revelas sin darte cuenta.
Esta semana cerramos la serie con la parte que casi nadie quiere mirar:
Las frases que te están costando oportunidades sin que lo notes.
Las dices por costumbre, por nervio, por “quedar bien”…
Y sin saberlo, te posicionan como alguien inseguro, reactivo o poco estratégico.
Si viste las primeras dos partes —
“10 formas de brillar en una entrevista”
y “10 preguntas para elegir tu próximo trabajo”—
Sabías que este cierre tenía que llegar.
Hoy toca ver lo que más incomoda.
Lo que te debilita.
Lo que te aleja del nivel al que dices aspirar.
Este carrusel no está diseñado para agradarte.
Está diseñado para que dejes de sabotearte.
Para que hables con claridad, madurez y criterio.
Para que el lenguaje juegue a tu favor y no en tu contra.
Si estás en un proceso de reinvención profesional, esto es obligatorio.
No opcional.
Porque la reinvención no empieza con un nuevo CV.
Empieza con una nueva forma de hablar de ti.
Desliza, guárdalo y compártelo con alguien que está buscando trabajo
pero no entiende por qué “no avanza”.
Tal vez no es su talento.
Tal vez es su narrativa.
Y eso… sí se corrige.
👉 Desliza el carrusel, guárdalo y compártelo con alguien que necesita dejar de arruinar sus entrevistas sin darse cuenta.
Los enlaces a las Partes 1 y 2 están en comentarios, las partes 4 y 5 llagarán en la semana.
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